The fashionable city of Lisbon / Wikicommons
The fashionable city of Lisbon / Wikicommons

Lisboa es el destino de la moda en Europa. Sol, playa, tranquilidad, seguridad, palacios, museos, barrios con personalidad… Ha ganado varios premios en los sectores de hostelería, gastronomía, medioambiente y, según el análisis realizado por Mercer sobre las ciudades con mejor calidad de vida, Lisboa es la 39ª del mundo y la 19ª de Europa. Los World Travel Awards la han declarado “Mejor Destino Mundial de 2017” y la ciudad ha entrado en el circuito de turismo urbano de fin de semana, con turistas que vuelven cada año.

Pero, como sabemos que aún son muchos los que se resisten a rendirse a los encantos de la capital portuguesa, estas son las 10 experiencias imprescindibles para conocer esta increíble ciudad.

El Puente 25 de Abril

Puente 25 de Abril / Wikipedia
Puente 25 de Abril / Wikipedia

Hace medio siglo no había ningún puente que uniera Lisboa con la orilla sur del Tajo. En la época de Salazar, se construyó uno que adoptó con su nombre y que más tarde fue renombrado a Puente 25 de Abril para recordar la revolución. De la misma manera que su homólogo en Estados Unidos, el puente de San Francisco, este puente rojo es una imagen icónica de la ciudad. Atraviésalo al atardecer, en coche, y disfruta de todos los colores que ofrecen sus vistas.

El parque Eduardo VII

Parque Eduardo VII / Wikipedia
Parque Eduardo VII / Wikipedia

Nombrado en honor al rey Eduardo VII de Inglaterra, para reforzar los vínculos entre los dos países, este parque es más bien una atalaya. Para los turistas que disfrutan perdiéndose, este parque será su mejor brújula. Situado al lado de la plaza Marquês de Pombal y con el rio de horizonte, es perfecto para un paseo tranquilo. Es reconocido internacionalmente por ser lel hogar de la mayor feria del libro de Lisboa.

La Avenida da Liberdade

Avenida da Liberdade / Wikipedia
Avenida da Liberdade / Wikipedia

La Avenida de la Libertad con sus alamedas y sus famosos mosaicos en la calzad, es una de las principales calles de la ciudad y tiene todo lo necesario para enamorarte, desde comercios de lujo para los amantes de las compras, hasta palacios del siglo XIX y edificios de Art Nouveau. Empieza tu paseo en la Plaza Marquês de Pombal hasta el Rossio.

La Plaza do Comercio

Plaza del Comercio / Wikipedia
Plaza del Comercio / Wikipedia

Bajando desde el Rossio, hazte un sitio entre la multitud por la Rua Augusta (escápate por las y atraviesa el Arco del Triunfo para encontrarte con la Praça do Comercio, presidida por la estatua ecuestre del rey João I, una de las más extensas de Europa. La plaza porticada en forma de U se abre al muelle del río, desde donde partían las carabelas hace 500 años.

El río Tajo

Río Tajo / Wikipedia
Río Tajo / Wikipedia

El estuario del Tajo ya es medio mar en Lisboa, y la prueba es que, de vez en cuando, saltan delfines por sus aguas. El río es la vida de la ciudad, el lugar al que se dirigen sus calles, el nervio de los lisboetas, que se abre a peatones, pescadores y ciclistas. El paseo de 10 kilómetros entre la Plaza del Comercio y la Torre de Belém es imprescindible.

El tranvía 

Tranvía de Lisboa / Wikipedia
Tranvía de Lisboa / Wikipedia

El tranvía lisboeta es como el de San Francisco, haciendo un recorrido por las empinadas y estrechas cuestas de la ciudad y mirando a los ojos a sus monumentos más icónicos. Te recomendamos que te subas en el parque de Estrela y vayas dirección al Castillo de San Jorge hasta Graça. Una vez allí puedes aprovechar para visitar la colonia Villa Bertha.

El castillo de São Jorge

Castillo de San Jorge / Wikipedia
Castillo de San Jorge / Wikipedia

El Castillo de San Jorge, el único de Lisboa y a medio camino entre el Rossio y la Praça do Comercio, es hoy en día un mirador de la ciudad. Además, su visita supone la excusa perfecta para pasear por los barrios de Alfama y la Morería y callejear al encuentro de historia y rincones únicos.

El Mirador de Alcântara

Mirador San Pedro de Alcántara / Wikipedia
Mirador San Pedro de Alcántara / Wikipedia

También cerca del Rossio, se encuentra el Mirador de Alcántara, en los jardines de São Pedro. Con un encanto especial, te ofrece increíbles vistas a los lujosos espacios verdes que lo rodean, así como a la Iglesia de São Roque. Si puedes, visita también los miradores de Graça y de la Senhora do Monte.

El museo Calouste Gulbenkian

Museo Fundación Gulbenkian / Wikipedia
Museo Fundación Gulbenkian / Wikipedia

La Fundación Gulbenkian, con sus amplios y preciosos jardines, es el lugar perfecto para familias con niños y ofrece una visita cultural y artística que siempre es interesante.

El monasterio de Los Jerónimos

Monasterio de Los Jeronimos / Wikipedia

El imponente Monasterio de Los Jerónimos es un ejemplo único de la arquitectura de estilo manuelino. Un estilo que, en lugar de destacar cruces y santos, labra en la piedra sogas, plantas o instrumentos de navegación. Aquí están enterradas personalidades como: Vasco de Gama, Luis de Camoes y Fernando Pessoa.