COVID-19 leads to a further suspension in the termination of rental contracts in Portugal
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El gobierno portugués ha decidido una vez más prorrogar la ley que prohíbe la rescisión de los contratos de alquiler que deben expirar para seguir protegiendo a las familias durante la pandemia de coronavirus en Portugal. La prórroga de 6 meses fue aprobada por los diputados de Portugal. A la espera de la aprobación final del Parlamento, esta medida, que debía expirar el 31 de diciembre de 2020, estará vigente hasta el 30 de junio de 2021.

El Gobierno portugués afirmó que la ley "no afecta al pago regular del alquiler", lo que significa que los inquilinos deben seguir pagando el importe acordado que se indica en el contrato de alquiler para poder beneficiarse de la medida.

A medida que la pandemia de COVID-19 continúa en Portugal, esta medida para proteger a los inquilinos da como resultado la suspensión de las siguientes acciones:

  • las denuncias de arrendamientos residenciales y no residenciales realizadas por arrendadores
  • el vencimiento de los arrendamientos residenciales y no residenciales, a menos que el inquilino no se oponga a su rescisión
  • los efectos de la revocación o de la oposición a la renovación de los contratos de arrendamiento de vivienda y no vivienda realizados por el arrendador
  • el período señalado en el artículo 1053 del Código Civil, si el vencimiento de ese período se produce durante el período de vigencia de dichas medidas
  • la ejecución hipotecaria de una propiedad que es propiedad de la residencia permanente de la parte excluida.

Esta propuesta no contempla la creación de un subsidio de alquiler para establecimientos comerciales que hayan sufrido una fuerte reducción de facturación por los efectos provocados por la pandemia COVID-19, medida que también fue aprobada la semana pasada, pero que se incluirá en un ley autonómica.