
Enclavado en el norte de Portugal, el valle del Duero es una región famosa por sus impresionantes paisajes, su rica historia y sus excepcionales vinos. Con viñedos en terrazas que se extienden por onduladas colinas y el emblemático río Duero serpenteando por el valle, este lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO ofrece una combinación única de belleza natural y patrimonio cultural. Si es eres un experto en vinos, un aventurero o alguien que busca explorar las joyas ocultas de Portugal, el valle del Duero es un destino que promete cautivar e inspirar. En esta guía, exploraremos todo lo que hay que saber sobre esta pintoresca región, desde su producción vinícola hasta las ciudades de visita obligada y las rutas panorámicas.
¿Dónde está la región del Duero en Portugal?
La región vinícola portuguesa del Duero está situada en el río Duero, en la región de Trás-os-Montes y el Alto Duero. El valle del Duero, en el centro del norte de Portugal, está protegido por cadenas montañosas que ofrecen unas vistas impresionantes de la región y está a 97 km de la ciudad de Oporto. Una de las mejores maneras de explorar el valle del Duero es en coche, pero no es la única opción. Una forma barata de ir de Oporto y al valle del Duero es el tren, un viaje conocido por sus impresionantes vistas sobre el río Duero, y que vale el precio de 9,75 euros.
¿Vale la pena visitar el valle del Duero?
El Valle del Duero es un lugar que no puedes perderte y que bien merece una visita. Las razones son infinitas: desde retiros para los amantes del vino, hermosos paisajes fluviales y paseos por las montañas, hay algo para todo el mundo en esta impresionante parte de Portugal.
Cosas que hacer en el valle del Duero

Para los amantes del vino
Cuando se habla de vino, el valle del Duero es famoso sobre todo por su vino de Oporto, un rico vino dulce que se ha ganado el reconocimiento internacional. Las empinadas laderas del valle y su terruño único crean las condiciones perfectas para el cultivo de las uvas autóctonas que hacen del Oporto una bebida tan especial. Pero el valle del Duero también produce una gama de vinos tintos y blancos excepcionales, desde los tintos suaves y aterciopelados hasta los blancos frescos y aromáticos.
Muchas de las quintas del valle ofrecen visitas guiadas, catas de vino e incluso la oportunidad de participar en actividades relacionadas con la vendimia. Tanto si te gusta el vino como si simplemente sientes curiosidad por el proceso de elaboración, tienes mucho que descubrir. Para disfrutar de una experiencia completa del legado vinícola del Duero, no olvides visitar bodegas emblemáticas como Quinta do Crasto, Quinta da Pacheca y Quinta do Vallado.
Cruceros fluviales
Una de las mejores formas de conocer el valle del Duero es realizar un crucero fluvial. El río Duero serpentea por el valle, ofreciendo vistas incomparables de los viñedos en terrazas, los exuberantes paisajes y los pintorescos pueblos encaramados en las laderas. Un crucero fluvial te permite relajarte y disfrutar de la belleza del valle mientras aprendes sobre su rica historia y su herencia vinícola.
Varias compañías ofrecen cruceros que van desde excursiones cortas de un día a viajes de varios días. Algunos incluso incluyen catas de vino a bordo, lo que te da la oportunidad de probar los caldos locales mientras te empapas del impresionante paisaje.
Disfruta la cocina local
Ningún viaje al Valle del Duero estaría completo sin probar su cocina tradicional. La región es conocida por sus platos abundantes y caseros, muchos de los cuales maridan a la perfección con sus vinos. Algunas especialidades locales son:
- Bacalhau à Douro: El bacalao salado, alimento básico de la cocina portuguesa, se prepara con aceite de oliva, ajo y una variedad de hierbas.
- Feijoada: Un guiso rico y sabroso hecho con alubias, carne de cerdo y salchichas.
- Cabrito asado: plato tradicional que se sirve a menudo en ocasiones festivas.
- Queso del Valle del Duero: no dejes de probar algunos de los quesos artesanales de la región, como el Queijo da Serra
Marida estos platos con una copa de Oporto o un vino tinto local y completa tu experiencia gastronómica en el valle.
Senderismo y actividades al aire libre
Para los que buscan aventura, el valle del Duero ofrece una serie de actividades al aire libre que le permiten explorar su belleza natural. El senderismo es una forma popular de disfrutar de los espectaculares paisajes de la región. Hay varios senderos señalizados, como el Parque Natural Internacional del Duero y la Rota do Vinho, que ofrecen vistas impresionantes del valle y las colinas circundantes.
El ciclismo es otra forma estupenda de explorar la zona, y algunas bodegas ofrecen alquiler de bicicletas. Si deseas vivir una experiencia única, puedes hacer una excursión en jeep o un viaje en globo aerostático para contemplar el impresionante paisaje del valle a vista de pájaro.

Explorar las ciudades del valle del Duero
El valle del Duero está salpicado de encantadoras ciudades y pueblos que ofrecen una visión de la vida tradicional portuguesa. Algunos de los lugares de visita obligada son:
- Peso da Régua: conocida como la «capital» del valle del Duero, Peso da Régua es el eje central del enoturismo. Aquí encontrará museos dedicados a la historia del vino, hermosos miradores y muchas bodegas que explorar. También es una base ideal para explorar el valle circundante.
- Pinhão: este pequeño pueblo es famoso por su pintoresca ubicación y sus impresionantes vistas del río y los viñedos. Pinhão es la puerta de entrada a algunas de las fincas vinícolas más famosas, y su pintoresca estación de tren, con sus icónicos azulejos, es un lugar perfecto para hacerse una foto.
- Lamego: ciudad histórica conocida por su arquitectura barroca, Lamego cuenta con impresionantes monumentos como el Santuario de Nuestra Señora de los Remedios y la Catedral de Lamego. También es una excelente parada para probar delicias locales como los «pastéis de Lamego», un dulce hecho con almendras y huevos.
- Vila Real: situada a la entrada del valle del Duero, Vila Real es una encantadora ciudad con una rica historia. No te pierdas el impresionante Palacio Mateus, famoso por sus jardines y su relación con el emblemático vino rosado Mateus.
Joyas ocultas del valle del Duero
Explora las maravillas menos conocidas del valle del Duero, como São Leonardo da Galafura, que ofrece impresionantes vistas panorámicas, y Foz do Tua, un sereno paraje junto al río Tua. Descubre el antiguo arte rupestre en el Parque Arqueológico del Valle del Côa, o visita la Quinta de Avessada para vivir una experiencia vinícola íntima. Miradouro de Casal de Loivos ofrece unas vistas impresionantes, mientras que Provesende y Vale de Mendiz ofrecen encantadores pueblos vírgenes y pintorescas rutas de senderismo, perfectas para una escapada más tranquila.
¿Cuál es la mejor época para visitar el Valle del Duero?
¿Cuáles son los mejores meses para visitar el Valle del Duero? El Valle del Duero es hermoso durante todo el año, aunque las temperaturas medias y el tiempo varían mucho a lo largo del año. La mejor época es entre mayo y octubre, aunque los meses de verano de julio y agosto pueden ser muy calurosos en la zona. Sin embargo, para poder disfrutar plenamente de la zona, el momento ideal para visitar el Valle del Duero es durante la época de vendimia, cuando los viñedos están listos para la cosecha y los colores son realmente impresionantes.