Artículo original escrito por houzz
Para encontrar oficinas abandonadas, almacenes en desuso o edificios perdidos en estado de abandono, solo es necesario que pasees por una ciudad o viajes al campo. No se trata de ruinas de belleza melancólica, sino de un patrimonio arquitectónico sustancial que podría ser una oportunidad extraordinaria para obtener viviendas de calidad y un verdadero manifiesto contra el desperdicio.
A continuación, te presentamos 5 buenas razones (y una advertencia) para convencerte de restaurar un inmueble abandonado:
1. El atractivo sostenible de la recuperación
El objetivo de cualquier política urbana sostenible es reducir el consumo de tierra, por este motivo, la recuperación de edificios existentes, que evita la construcción de nuevos, es una opción ideal y, además, muestra todo el encanto de los edificios abandonados, no solo de los históricos. El truco para preservar el atractivo de una casa antigua es dejar el sistema original y mejorar los detalles arquitectónicos con simplicidad. Por ejemplo, un toque de color es suficiente para destacar la superficie de un enlucido de cal tradicional o para iluminar partes anónimas de una vieja puerta de madera.
2. El reto del estilo ideal
Contrariamente a la creencia popular, un proyecto de restauración o reutilización no tiene por qué ser tradicional. En realidad, se trata más bien de crear un ambiente increíble a partir de la reinvención de lo ya existente. Para proyectos en la ciudad, la inspiración para la reestructuración es normalmente de estilo industrial, un estilo nacido en los Estados Unidos para reutilizar los espacios de trabajo en desuso después de la Segunda Guerra Mundial. En esta situación, se insertan elementos característicos de los entornos de trabajo, como ventanas grandes o mostradores, en los loft residenciales obtenidos de antiguos almacenes.
Para la restauración de ruinas fuera de la ciudad, muchos prefieren la simplicidad del estilo campestre que muestra las vigas de madera de los techos, las paredes de piedra, ladrillo o azulejos originales. Aunque se trate de una construcción rústica, no es obligatorio usar muebles clásicos o antiguo, normalmente resulta jugar con el contraste entre las estructuras tradicionales y los muebles modernos o personalizar las habitaciones con un toque de eclecticismo.
Incluso el uso de muebles y accesorios de estilo vintage es adecuado para proyectos de recuperación de edificios abandonados, tanto en entornos urbanos como rurales, porque los elementos modernos congenian fácilmente con los elementos de la construcción histórica, simple y esencial. En resumen, no existe un único estilo correcto, sino que cada proyecto es diferente y se debe adaptar el estilo al edificio que se quiere recuperar, así se consigue mejorar su carácter y especificidad.
3. La búsqueda de arquitecturas inéditas
Otra razón para recuperar edificios históricos es la posibilidad de experimentar con nuevas arquitecturas, nacidas de la unión estilística entre la arquitectura histórica y el lenguaje arquitectónico moderno. El contraste entre un muro de piedra y una ventana transparente es una elección de impacto seguro.
4. Crowdsourching
Se debe recordar que en la era de internet no faltan las iniciativas sociales para apoyar la recuperación de edificios abandonados, sean públicos o privados, destinados a su reutilización con fines culturales.
5. Incentivos y bonus
Las nuevas políticas del estado, como el bonus ristrutturazione (un tipo de detracción fiscal válida si el edificio es residencial), ofrecen un gran impulso para la reutilización. Además, muchos municipios reducen los costes de urbanización u ofrecen bonificaciones volumétricas a quienes reutilizan edificios abandonados. En la Toscana, por ejemplo, la Ley Regional n. 3 de 7.2.2017, ha desarrollado una política ad hoc para la recuperación de edificios rurales abandonados.
6. Finalmente, atención a la seguridad sísmica
En conclusión, hay muchísimas razones para preferir la reforma a la nueva construcción, que van desde la cultura de la sostenibilidad a la investigación arquitectónica o la mejora del patrimonio histórico. Sin embargo, no se debe olvidar prestar especial atención a la seguridad sísmica, especialmente en áreas de alto riesgo. Realizando una verificación técnica preliminar se puede comprobar la viabilidad de las intervenciones y de los trabajos indispensables que se realizarán en las estructuras.